Cárceles y Justicia
*** Dos
palabras decadentes en nuestro país. Tanto nuestro sistema penitenciario, como
el mismo sistema Judicial en Guatemala, se han ido deteriorando con los años,
es un efecto extraño y perjudicial para nuestro país; ya que las empresas cada día
se modernizan, los hogares diariamente logran desarrollarse y salir adelante,
los países en el mundo entero están en constante progreso, pero nuestro sistema
penitenciario vive en constante retroceso. La pregunta es: que puede pasar con
un país el cual su sistema judicial va en decadencia, cuando la impunidad
excede el 90% y su sistema penitenciario es un verdadero caos? No me cansare de
decir que: El fundamento de una Nación, son sus leyes, y que: los países son
tan fuertes, como lo son sus leyes y la correcta aplicación de las mismas. En
el caso del sistema penitenciario, existe un efecto critico y dañino para todos
los que vivimos aquí; ya que si no hay un verdadero castigo para los que hacen
mal, y por el otro lado, una justa actuación contra los que delinquen según su
genero, esto se pondrá cada día mas difícil de sobrellevar, se necesitaran
mucho mas que cárceles para corregir todos los errores de nuestra sociedad, ya
suficientemente lastimada; necesitaremos ciudades enteras, para llenarlas de
muchachos que en este momento están viendo Tv o estudiando, y que no saben, ni
aun entienden, que significa los linderos de la Justicia de su país.
*** Hace 25 años comencé
a trabajar en las cárceles, ayudando a nuestro sistema judicial, a hacerle
comprender a aquellos muchachos de antaño, cual es la razón verdadera, por la
cual estaban presos, mostrándoles a la luz de la Biblia cual ha sido siempre
el propósito para sus vidas de parte de Dios. Siempre tratamos, no solo
mostrarles sus errores, si no la solución a los mismos, desde ese tiempo hasta
el día de hoy, he visitado esos centros de “rehabilitación”, que es lo que debería
ser una cárcel, no solo un lugar de castigo por sus maldades, si no el medio de
su reinserción a una vida restaurada y distinta, a la cual toda persona tenemos
derecho y podemos lograrlo, aun, en una Guatemala devastada, por faltar de una
correcta aplicación de la Ley.
*** Los números
no fallan; hace 23 años cuando comencé a ir al preventivo de la zona 18, habían
600 personas detenidas como máximo, ahora pasan de 3400, recuerdo la primera
vez que fuimos a la cárcel Santa Teresa hace 20 años, eran menos de 100
mujeres, ahora hay casi 600, que pasará dentro de 20 años mas? Somos una
sociedad en crecimiento señores, una cultura en pleno desarrollo, nuestro país
apenas llega a tener menos de 100 detenidos por cada 100 mil, sociedades como
la de Estados Unidos, pasan los 700 por cada 100 mil, es un buen numero! Tener mas
de 2 millones de presos en un país, es un absurdo! Pero bueno, dejemos a los
pobres gringos resolver sus propios problemas, porque nosotros tenemos
suficiente con los nuestros.
*** Cual es el
problema medular en el caso de las cárceles de nuestro país? Pues, como casi
todos los problemas que tenemos en el país, estos son generados por la avaricia
de unos cuantos corruptos que se aprovechan de cualquier institución donde ven
fluir el dinero, nuestro sistema penitenciario cuenta con un presupuesto
millonario, para la retención, seguridad, alimentos y construcción de nuevos
centros penitenciarios, eso significa varios millones de comisión, para
aquellos que les gustan las comisiones, si hablamos en cifras, el Gobierno de
los Colon cobraban del 20% para arriba de comisión, para la asignación de obras
y servicios, (eso ya no nos asusta saberlo verdad?) entonces con la ayuda de la Señora Baldetti y su súper equipo
anti-comisiones (jajaja), se viene un buen tiempo para el sistema penitenciario,
porque con ese 20% mas de presupuesto, ojala! se lograran grandes obras, mas educación,
ojala que esta vez la construcción de la cárcel de máxima seguridad no mande a
la cárcel a mas comisionistas! mejores colchones (no existen en la mayoría de
las cárceles) comida decente, (como la que comen las personas) Mas personal de
seguridad; bloqueadores de señal contra celulares, como los que bloquean las
señales de los celulares (jajaja), pero como esos bloqueadores que funcionan 24
horas, y que aunque se paguen los miles de quetzales a los “jefes” por apagar
los bloqueadores a ciertas horas, siguen funcionando, a esos bloqueadores me
refiero.
*** Hay mis
amigos si se pudieran contar tantas tretas y estrategias, que uno llega a
conocer a lo largo de los años, visitando esos lugares de rehabilitación, donde
no se rehabilita, si no que se malversa, se pervierte, se mal aconseja y se
maltrata, a aquellos que preventivamente son detenidos, aquellos que causaron
un accidente vial y salen de allí a robar, a matar o extorsionar, porque fueron
instruidos por los que ya su corazón esta contaminado de la maldad, y se
dedican a destrozarle la vida al ingenuo, o, al muchas veces inocente, sabían
ustedes que mas de 6000 personas están durmiendo en una cárcel en nuestro país,
a razón de Q135 diarios de presupuesto, estarán allí por meses, mientras algún
Juez llega a conocer su caso, para dictarle libertad condicional, porque no hay
testigos del robo de una prenda de ropa, que sustrajo de un supermercado? La
pieza costaba Q85 Esta es la
Justicia en Guatemala! Como ésta, les cuento 100 historias,
que les costaría creer que esto sucede acá en Guatemala.
*** Soluciones? Por
supuesto que las hay! A mi parecer, viviendo muy de cerca la realidad
carcelaria de nuestro país, bastaría con contratar a 300 jueces mas, que se
dediquen a tratar casos comunes y fáciles de resolver, en meses, nuestras cárceles
estarían vaciadas en un buen porcentaje, esto llevaría a tratar con minuciosidad
y profundidad, aquellos casos que realmente preocupan y que son necesarios de
castigar y dar una lección a los delincuentes que los cometen; se podría decir
que el estorbo verdadero, es la súper población y lo engorroso de los tramites
y protocolo para liberar a personas que muchas veces no merecen estar allí
dentro. Quiero terminar diciendo que; “las pequeñas zorras, echan a perder los grandes viñedos”, son estos “pequeños
detalles” los que han contribuido a que en nuestra querida Guatemala, la Justicia verdadera, se
vea empañada, todos tenemos la responsabilidad de ayudar, proclamando estas
verdades, siempre que esté a nuestro alcance.