Siekavizza
*** El caso de
Cristina Siekavizza es uno de tantos que reflejan la realidad de la sociedad en
la que vivimos; por un lado, el caso extremo de las familias en conflicto,
llegando al punto del desastre; por el otro, la falta de prevención y
reconocimiento de las personas según sus referencias y su pasado, cosa que
muchos padres han olvidado y dejado al margen, para saber con quién o quienes
nuestros hijos se relacionan; un tercer aspecto es el más profundo del caso,
como lo es: la evidente debilidad en nuestro sistema de Justicia, caso que nos
lleva a pensar que en nuestro país vivimos en la triste realidad donde el
corrupto, el delincuente y el malvado, caminan libremente por nuestras calles,
pasan a nuestro lado, estrechan nuestra mano y se burlan de lo que realmente
vale la pena en esta vida, como lo es el apego a la ley, el camino de la
Justicia, el vivir en paz unos con otros y aun mas, como está escrito en la
Biblia, el amarnos los unos a los otros.
*** Hay cosas
que no podemos enseñarle a nuestros hijos cuando ya son mayores, las
instrucciones se les da a los niños, para que cuando sean viejos y nosotros
mas, no tengamos de que preocuparnos. Puedo imaginar lo que están viviendo en
este momento los padres de Roberto Barreda, esposo de Cristina; porque ellos
como ex magistrados de la CSJ, han tenido en sus manos infinidad de casos,
donde les toca que deliberar en contra de personas, que como su hijo, está a
punto de enfrentar, porque este hombre tendrá que enfrentar a las Justicias que
juzgan a todos los hombres en la Tierra, una: esa Justicia que cualquiera con
un poco de esfuerzo y mala intención, puede librarse, esa es la Justicia
humana, establecida por hombres pensantes, que quieren vivir en concordia en
una misma comunidad; la otra: la
Justicia Divina, inmutable, incorruptible, fiel, justa e inmarcesible, por el
hecho de ser emanada desde el Cielo, para salud y vida de los hombres que
vivimos en este mundo.
*** Si por un
caso extremo, los señores ex magistrados pudieran lograr sus intereses
mezquinos de librar a un delincuente, (aun cuando este sea su hijo) de las
leyes de este país en decadente Justicia; estoy seguro que Dios hará lo suyo,
impartiendo Justicia, como solo Él lo sabe hacer. Es imposible que nuestro país
sea juzgado por personas que, como esta pareja de ex magistrados, en lugar de
afrontar sus errores de no haber instruido a tiempo a sus propios hijos, nos
endilgan a todos los que les rodeamos, este dolor y esta angustia del caso tan
terrible de la señora Siekavizza, y
ahora la desaparición de sus dos pequeños hijos. Pienso en voz alta y me pregunto:
que podrá llegar a enseñarle Roberto Barreda a un niño de 7 y una niña de 4
años? Cuales irán a ser las instrucciones de este hombre para estas dos
personitas que aun no han crecido y que tienen su vida por delante? Si sus
abuelos paternos no supieron sembrar, mucho menos su padre, porque Dios no
puede ser burlado y mucho menos aceptar reclamos en casos como este, lo que
nosotros como padres sembramos, nuestros hijos tendrán que disfrutar o sufrir.
*** Es mejor
el final de un asunto, que el principio del mismo; y acá una prueba más a ser
superada por las leyes de nuestro país, esperando de todo corazón que sea
superada; porque las leyes son el fundamento de una Nación, y un país es tan
fuerte, o tan débil como lo son sus leyes. Necesitamos Justicia en Guatemala,
necesitamos hombres justos que caminen en la Verdad, que vivan limpiamente
honrando a Dios y a su familia, que aflore en nosotros la ética, la moral y el
cumplimiento de los mandamientos dados por Dios, para salud y vida de los que
nos sometamos a ellos; el vivir en paz en Guatemala depende de casos como este,
porque el mensaje final es para nuestros hijos y sus generaciones; la cultura
en la que vivimos, tristemente, no es más que el fruto de lo que en el pasado
muchos padres erróneamente sembraron, tenemos hoy en nuestras manos la
semilla a ser sembrada, sepamos todos
que, Guatemala es un campo fértil donde crecen las flores y su primavera es
eterna, depende de sus hijos que siembren en ella.
JUAN CHAPIN: BUEN COMENTARIO PERO ME PREGUNTO PORQUE NO PONEN FOTOGRAFIAS DE CRISTINA Y Y DE SU MARIDO CON LOS NINOS PARA RECONOCERLOS EN CUALQUIER PARTE DEL MUNDO DONDE SE ENCUENTREN PARA QUE LO CAPTUREN Y PAGUE POR LO DE SU ESPOSA DESAPARECIDA.
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